Nada ha cambiado en el fondo del PP. No sólo en lo que se refiere a prácticas corruptas sino también a la hora de ser patriotas. Se limitan a la pulserita rojigualda en la muñeca y a ver quien pone la bandera más grande en su casa o en sus sedes. Si España es atacada desde el exterior, el comportamiento del PP, de Casado y de Feijóo, es calcado: ellos se alían con el atacante, con el de fuera, contra España siempre. Romperse la nariz para perjudicar a la cara. Ahora Feijóo se siente "hombre de Estado" para acudir por su cuenta a Argelia y afear al Gobierno de Sánchez su comportamiento con el tema del Sahara. Que poco democrático y sobre todo qué anti español. 

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El Presidente Sánchez no ha dejado pasar la ocasión, en sus intervenciones en Málaga y otras localidades, durante la campaña andaluza: “hablan mal de España dentro y fuera del país… para esto no hacía falta que echaran al anterior líder, Casado, ya que sigue siendo el mismo PP, el de siempre, el que bloquea y niega cualquier avance social de España”, ha dicho Sánchez en tono irónico sobre el nuevo jefe de la oposición. Más allá, ha llegado la ex vicepresidenta del Gobierno, y diputada Carmen Calvo, en un acto feminista en Valencia organizado por la UGT: “es impropio de un líder demócrata [y mucho más del jefe de la oposición] que se salte al Gobierno democrático y se dirija directamente a Argelia… [cuando se suspendió el Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación entre España y Argelia que data de 2002]. 

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Carmen Calvo, que refuerza la campaña andaluza todos los lunes desde el programa Ágora de la Cadena SER, poniendo en su sitio a Moreno y puntualizando su complacencia e inacción, tiene el dardo certero también para el presidente popular, cada vez que hace alarde de ignorancia y de no haber sabido encontrar su espacio en Madrid, como jefe de la oposición y líder de un partido que aspira a gobernar. Ha pedido a Feijóo, rigor en sus intervenciones y que “sea más consciente de que estar en política nacional es mucho más complejo”. En cierto modo, sin decirlo, la ex vicepresidenta y actual presidenta de la Comisión de Igualdad del Congreso, le vino a recordar que ya no está en Galicia, su pueblo, su feudo, donde lleva gobernando con mayorías absolutas desde el 2009 hasta hace un par de meses que vino para Madrid, tras defenestrar su partido a Pablo Casado por faltón, crispador y sobre todo por inepto. Aunque el detonante de su caída y la llamada al soldado Feijóo a salvar la patria, se debió fundamentalmente al atrevimiento del cesado para criticar a Díaz Ayuso, la actual máquina de ganar elecciones en Madrid, de forma un tanto estrambótica.

Finalmente Feijóo podría ir tomando nota de lo que son las relaciones internacionales y diplomáticas de un Estado y a quien le corresponde intervenir. Gracias a la rápida actuación de la Unión Europea, que ha respaldado sin titubeos a España provocando que Argelia rebajara la tensión y afirmara que en ningún caso este país había roto lazos comerciales o ni siquiera se había planteado suprimir el suministro energético a España. La tarea de Jose Manuel Albares, ministro de Exteriores, ha sido frenética en las últimas cuarenta y ocho horas, en Bruselas y gracias también a la rápida reacción del Alto Comisionado, Josep Borrell, advirtiendo al país magrebí que estas “conductas podrán traer consecuencias y que lo que hay que hacer es buscar una salida acordada al conflicto”.

Tan seria está siendo la crisis que el Gobierno argelino ha convocado un Consejo de Ministros este mismo domingo para despejar las dudas con respecto a España y a la Unión. Para Argelia, que ha dado un giro de 180 grados este fin de semana, "nunca se quisieron romper las relaciones y todo ha sido muy precipitado" e incluso ha emitido un comunicado de Exteriores donde se aclara "que no existe ninguna base para bloquear el intercambio entre España y Argelia". ¿Se ha enterado señor Feijóo cómo usted, con sus ganas de criticar a España y su Gobierno y dar la razón a la posición hostil de Argelia, no ha conseguido nada, salvo quedar en el ridículo más espantoso? Deje gobernar y aprenda, quizá algún día le toque a usted... aunque al paso que va. Va a tardar mucho.

Finalmente el tema ha quedado encarrilado y el líder popular Feijó con la cara roja ¿Aprenderán algún día los líderes del PP a actuar de forma patriótica? A ellos que tanto se les llena la boca con la palabra patria y libertad.